Palabras desde otro mundo

Superrealismo:
(Del fr. surréalisme).
m. Movimiento literario y artístico, cuyo primer manifiesto fue realizado por André Breton en 1924, que intenta sobrepasar lo real impulsando con automatismo psíquico lo imaginario y lo irracional. (mira tu por donde, no sabia que lo de surrealismo venía de aquí).

Ridículo: (1)
(Del lat. reticÅ­lus, bolsa de red).
1. m. Bolsa manual que, pendiente de unos cordones, usaban las señoras para llevar el pañuelo y otras menudencias. (esta no la conocía yo)
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Ridículo (2), la.
(Del lat. ridicÅ­lus).
1. adj. Que por su rareza o extravagancia mueve o puede mover a risa.
2. adj. Escaso, corto, de poca estimación.
3. adj. Extraño, irregular y de poco aprecio y consideración.
4. adj. De genio irregular, excesivamente delicado o reparón.
5. m. Situación ridícula en que cae una persona.
en ridículo.
1. loc. adv. Expuesto a la burla o al menosprecio de las gentes, sea o no con razón justificada. Estar, poner, quedar en ridículo.

Que majos estos chicos de la RAE, me han fastidiado el tema sobre el que iba a tratar, porque así, a bote pronto, parece que se podría tratar de lo mismo (mirando la primera acepción del segundo grupo de ridículo)…o igual no.

¿Son una misma cosa el surrealismo y el ridiculo?. ¿Los diferencia tan solo la intencionalidad del “autor”?. Recurriendo a una de esas comparaciones que pueden parecer redundantes: No es lo mismo reirte “con” alguien, que reirte “de” alguien. Aunque esta definición no deja de ser algo simplificado hasta el extremo.
Porque no solo se pueden tratar temas “humorísticos” mediante el surrealismo (o superrealismo), es mas, casi se podría decir que es el metodo ideal para tratar temas “demasiado” seríos (o duros) como para tratarlos con la seriedad que se merecen. He ahí otra nueva muestra de la linea que separa a nuestras dos contrincantes de hoy.
Porque aquel que no es consciente de lo serio que es el tema que esta tratando, y lo trata de manera frivola o trivial es facil que caiga en lo ridículo. Hay que conocer a fondo aquello de lo que hablas para darle un tratamiento adecuado. Porque claro, alguien que trata un tema trivial o frivolo con una seriedad que no se corresponde tambien puede caer en él ridículo (mierda, creo que estoy tirando piedras contra mi propio tejado).

Mas preguntas, es la guerra.
Pero claro ¿Qué es trivial, y que es importante? (lo se, lo se, estoy llevando esto a ese terreno tan mio que es la subjetividad. Pero claro, cada uno trata los temas que conoce, o cree conocer. Sino corre el riesgo de caer en el ridículo.)

Ah, la subjetividad. Cuanto me gusta (la mia) y cuanto la odio (la de aquellos a los que no entiendo).
Tachaaaaaan. Ya estamos (o estoy) con lo de siempre. O quizas no. Me explico (o al menos lo intento, de vosotros depende el decidir si lo logro). Aunque pensandolo un poco mas, me parece que podria reducir cualquier combate de este estilo a lo mismo.

Ahí va otra pregunta ¿La gente que hace el ridículo, es consciente de ello? ¿Creen, por el contrario que estan siendo ocurrentes, graciosos o ingeniosos?.
Yo creo que…a veces una cosa, y a veces otra (toma respuesta. No, si ya lo digo. Si yo estoy hecho todo un Perogrullo. De aquí me meto a político).
Replanteando la pregunta ¿Hay gente que hace el ridículo intencionadamente? ¿Hay gente que prefiere ser tratada como un bufon, al no encontrar, o creerse capaz de lograr otro metodo de integracio en un grupo?.

Me parece que este tema lo dejare para otro dia, porque me estoy desviando, pero a autenticos años luz, de lo que iba todo esto en un principio (parece que se esta convirtiendo en costumbre, no me creía yo tan dado a las divagaciones. Bueno, lo cierto es que si, pero no en publico).

Volviendo al combate estelar de esta noche: En la esquina derecha del cuadrilatero, tenemos al surrealismo. Bigote de Groucho Marx, Sombrero de Tip, y como calzones unos cocos de los Monty Python (traidos hasta aquí por un par de simpaticas gaviotas africanas ¿o eran europeas?). En la esquina opuesta y haciendo muecas, tenemos al ridículo: Una aberración fruto de la mezcla de Jerry Lewis, Jim Carrey y Peter Sellers. Arbitra el respetado Subjetividad. A continuación, como si de un anuncio de carne se tratase, nuestra azafata; vergüenza ajena, dara un paseito con el cartel que anuncia el primer asalto.

Como todos podreis haber comprobado, en este combate imaginario (y pretendidamente surrealista) la asignación de roles ha sido otorgada de una manera completamente arbitraria por mi concepción de tales conceptos. Habrá quien intercambiase el nombre de los púgiles, o quien hiciera de una mezcla de todos ellos uno unico (ya fuera o fuese otorgado cualquiera de los dos nombres a la criatura conceptual resultante).

Así que al final acabamos como habíamos empezado. Sin nada concreto. O quizas no. Porque abordando una nueva perspectiva aun no tratada. Tambien hay situaciones que se pueden considerar a la vez surrealistas y ridículas, y situaciones (conceptualmente ridiculas según criterios personales) ridículas pero comúnmente aceptadas. Vamos, que ni estan todas las que son, ni son todas las que estan (volviendo a las comparaciones en apariencia redundantes).
Y mira tú por donde que me esta saliendo una columna mas bien surrealista (y espero que no ridícula), que espero que tenga su gracia, tratando por momentos temas que (en mi opinión) son serios (aunque tampoco es que sean el acabose del devenir vital de la raza humana).
Aunque tambien es posible que solo este soltando un monton de gilipolleces.
El judgar esto, ya eso ya es asunto de vuestra completa y compleja (o no) subjetividad.

Como decía Henry Silva en “Amazonas en la luna”: Chorrada o no, ¡USTED DECIDE!
Como comenzaban los dialogos para besugos en los antiguos comics de Bruguera:

– Buenos dias
– Buenas tardes

Pues nada. Buenas noches.