Shadow World I

Siguiendo con la tradición que he establecido al hablar de estos “Mundos improbables”, vamos a hablar de otro de esos mundos que tanto me gustan, y que tantas vueltas ha dado a lo largo de su larga y complicada vida editorial.
A parte de eso, por supuesto, también hablaremos de Terry Kevin Amthor.
¿Que quién es este tío?
Pues el papaito del mundo (que no juego) que da título a esta entrada.
Claro, en sus inicios, el mundo no se llamaba así (bueno, en realidad, el mundo de juego no tiene ese nombre, sino Kulthea) si no que respondía al nombre de “Mundo del Loremaster”
Era el año mil novecientos ochenta y la compañía ICE (Iron Crown Entrerprises, para los despistados) acababa de nacer. En aquel momento teníaun único producto en el mercado: Arms Law (un sistema de combate “alternativo para la primera edición del AD&D)
Como primera aventura para aquel reglamento, sacarían un pequeño libreto en el que se describían la geografía, clima, unas cuantas ciudades (y algún que otro dungeon) de una isla situada en un mundo genérico de fantasía.
Este libreto estaría escrito por el amigo Terry y Pete Fenlon, presidente de la recién creada compañía (y abogado a tiempo completo para poder permitirse el lujo de publicar juegos de rol junto a unos amigotes universitarios)
La historia de ICE, si es caso (y se me cruza el cable) ya os la contaré otro día con mayor detenimiento (que también tiene tela) pero aquí hemos venido a hablar de Shadow World.

El señor Amthor iría realizando diversos suplementos para las distintas líneas de juego que producía la compañía (entre ellos el censurado “La Corte de Ardor” en el ochenta y dos, ambientado en la Tierra Media. Sólo lo menciono aquí porque este suplemento sería censurado por los gestores de los derechos de Tolkien. Mira que sugerir la idea de que hubiese elfos malos en aquel mundo… Que desfachatez) hasta que en el ochenta y nueve sacase una cajita en la que se leía “Shadow World Master Atlas” con esta portada del señor Tony Roberts (que no había sido hecha en exclusiva la caja, sino que sería una imagen contratada por agencia, pero bueno, al menos es bonita. Esto mismo sucedería con la práctica totalidad de las portadas de los distintos suplementos, lo que daba una imagen del juego un tanto deslavazada)
Portada de "Shadow World: Master Atlas"
La caja contenía dos libretos, más un pequeño añadido en el que se incluía lo necesario para realizar la conversión de los personajes de Rolemaster a otros sistemas como el AD&D o el RuneQuest y unos preciosos mapas de uno de los hemisferios del mundo.
A esta caja seguirían una serie de suplementos en grapa (de treinta y dos o sesenta y cuatro páginas) con aventuras sueltas ambientadas en aquel mundo. Ese mismo año sólo saldrían once. Ahí es nada:

Quellbourne, Land of the Silver Mist
Journey to the Magic Isle
Demons of the Burning Night
Tales of the Loremasters, Book I (os suena de algo esto del “Loremaster”)
Star Crown Empire and the Seas of Fates
The Orgilion Horror
Kingdom of the Desert Jewel
Tales of the Loremasters, Book II
Cyclops Vale and Other Tales
Jaiman, Land of Twilight
Islands of the Oracle

De todos estos, si queréis que os sea sincero, sólo consideraría imprescindibles los ambientados en la isla de Jaiman y en Emer (y si me apuras, tampoco todos. Quedaos sin más con Jaiman, Land of Twilight) Si queréis que os mienta; comprároslos todos. Cambiarán vuestra vida de maneras que no podéis ni sospechar.
Portada de Quellbourne
Me explico. La historia de Kulthea está muy vinculada a estas dos islas, y en la línea temporal que se nos marca en el Atlas, se podría decir que todos los eventos importantes están relacionados con estos dos emplazamientos.
Tampoco me entendáis mal. El resto de suplementos no es que sean malos, sino que pecan de ser un tanto genéricos (tanto estos que os menciono ahí arriba, como gran parte de los que vendrán a continuación) Así tenemos islas y que no dejan de ser un remedo de “Las mil y una noches” con otros que son remedos de Egipto o fantasías pulp con restos de imperios estelares. No están mal, pero rompen bastante la imagen de conjunto que se nos daba en la caja básica (igual porque Amthor no estaba directamente relacionado con ellos)

Al año siguiente saldría otra caja. Esta no tenía nada que ver con Shadow World (en un principio) aunque estaba ambientado en uno de sus continentes isla: Folenn. Esta jugarreta no deja de ser un poco timo, porque lo que nos vendían era un reglamento de miniaturas llamado Bladestorm (si a los de Games Workshop les funcionaba, ¿porqué no les iba a servir a ellos?)
Sí, en el reglamento nos hablaban un poco (muy poco) de la ambientación y sacaban un montón de personajes del lugar pero, como de costumbre con los suplementos no escritos por Amthor, poco o nada tenía que ver con la trama global.
La cosa no cuajó y al año siguiente sacarían un único suplemento llamado (originales ellos) “Bladestorm Bestiary” antes de reconvertirlo en un reglamento de figuras genérico llamado War Law un par de años más tarde.

Pero bueno, siguiendo en el año noventa, la ristra de novedades no era como la del año anterior sino que ya se moderaron un poco, así nos llegarían:

Sky Giants of the Brass Stairs
Nomads of the Nine Nations
Norek, Intrigue in a City-State of Jaiman
Emer & Master Atlas Addendum
Portada de Emer
Más o menos lo mismo que os he dicho antes, sólo que de aquí podríamos salvar dos suplementos: Emer (otra caja, donde se expandía la línea temporal del mundo) y Norek.
En el noventa y uno saldría el anteriormente mencionado Bladestorm Bestiary y Terry Amthor publicaría una aventura en el número veinticinco de la revista White Wolf (A dagger of jade) Con lo que tendríamos que esperar hasta el año siguiente para saber algo más de Kulthea.
La “novedad” llegaría con la segunda edición del Master Atlas (que aun que no fuese novedad del todo, si que era un libro, que no caja, muy recomendable ya que juntaba y expandía un poco más las líneas temporales del primer atlas y de Emer) y Eidolon, Sea-port and Sky-City, también una compra aconsejable.
El año siguiente saldría Gethaena, Underearth Emer (que no estaba mal… pero andaba ahí, ahí entre los interesante y lo saca cuartos) y podríamos decir que se acabó, al manos en lo que se refiere al tema rolero.
Ese mismo año (noventa y tres) saldría la primera de una serie de novelas; Stormriders, que sería seguida el año siguiente por el comienzo de una saga de novelas: Shadow World (Book 1): The Burning Goddess.
Para saber algo en ámbito rolero tendríamos que irnos al número tres del segundo volumen de la revista Grey Worlds, en la que daría comienzo una campaña en cuatro partes “The grand campaign Part One: A gathering Darkness”. Lamentablemente, la revista no prosperaría, y la campaña quedaría colgada.

El año siguiente nos darían un poco de carnaza con una campaña hormonada (de esas que mueres en cuanto alguno de los señores que pasan por ahí te mire) Curse of Kabis (que saldría para la nueva versión de Rolemaster RMSS) y se acabó lo bueno (al menos por parte de ICE)
La sequía sólo era paliada por las novelas Shadow World (Book 2): Clock Strikes Sword y Shadow World (Book 3): City of Assassins, en el noventa y cinco y Shadow World (Book 4): Stormriders en el noventa y seis.
No, no he leído ninguna, así que no puedo opinar.

Con su niño bajo el brazo (y tras la escarceos constantes que tenía la casa madre con la quiebra) Amthor se lanzaría a la autoedición y autopublicación. Bajo el sello de Eidolon studio sacaría tres suplementos:

Emer I: Haestra en el noventa y siete, Haalkitaine en el noventa y ocho y Emer Book II: The Northeast en el noventa y nueve.
Estos libros los vendería sólo por internet, tanto en PDF como en papel (aunque los “libros” consistían en una impresión del PDF encuadernado con anillas, junto a una impresión a color y a gran tamaño del mapa que los acompañaba) De todas formas, estos libros también son muy recomendables.
Para quitarse una espinita, también terminaría “The grand campaign” y la pondría a disposición de quien quisiese descargársela.

Y así llegaríamos hasta dos mil uno, que ICE (bueno, la marca ICE, porque la compañía había sido comprada por una gente que respondía al pintoresco nombre de “Aurigas Aldebaron LLC“ y que pertenecía a un fan de la compañía que luego haría unos cuantos movimientos empresariales raros. Al final, quienes publican los libros son una serie de ex-empleados de ICE, bajo el también pintoresco nombre de “Mjorlnir LLC”) sacaría una tercera edición del Master Atlas (o, más bien una reimpresión de la segunda edición) y comenzaría a vender en PDF algunos de los suplementos clásicos como Jaiman, Land of Twilight, Eidolon: City In the Sky o los libros que había publicado Amthor por su cuenta.
En dos mil tres sacaría, tanto en papel, como en PDF la cuarta edición del Master Atlas (que sería publicado aquí en castellano por La Factoría)
Buscando por ahí (bueno, en la página de Terry Amhor) he visto que en dos mil cinco publicó un mapa del hemisferio que no se mostraba en el mapa original, pero tampoco se explaya mucho más.

Y así estamos, más o menos hasta ahora, aunque parece que la cosa está resurgiendo (aunque con calma)
Hace un par de años, una empresa británica llamada “Guild Companion Publications Limited” llegó a un acuerdo con ICE (Eidolon Studio, El martillo de Thor y los tipos con el nombre mezcla de la estrella de la constelación de Tauro y unos tipos que conducían carros) para sacar nuevos libros.
Digo que la cosa va despacio porque en dos mil ocho sacaron un nuevo suplemento para Shadow World “Shadow World: The Land of Xa-ar” y este año han sacado uno nuevo (relativamente, a ver si me hago con él y os digo si trae algo nuevo) Shadow World Player Guide – The World ambos en PDF.

Y bueno. Eso es todo por hoy.

Actualización:
Gracias a los comentarios que ha dejado el señor FAC, tenemos a nuestra disposición las traducciones que hizo de «The grand campaign» y otros materiales de Shadow World desde aquí.

octubre 15, 2010 · Posted in Mundos improbables  
    

Comments

Leave a Reply